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Tony Oliva: “me hicieron una estatua en Minnesota y eso es increíble para un guajirito”

Toda reverencia de su tierra natal hacia un jugador como Tony Oliva parecerá siempre poca. Pinar del Río, la provincia en la cual nació en Cuba, parece no terminar de ubicar dentro de su inmenso listado de inmortales la figura de este hombre, con quien el Salón de la Fama de Grandes Ligas, luego de una demora imperdonable, saldó las deudas con su legado.

Tony Oliva regresó una vez más a su tierra, pero no hubo acto protocolar ni sesiones extraordinarias para hacer entrega de alguno de esos escudos o pergaminos que alguien o varios, deciden otorgar. Para este pinareño esos honores parecen estar vetados, pero, desde su humildad no los siente necesarios.

Por fortuna, queda la iniciativa de unos pocos para intentar suplir tanta ignorancia desde lo institucional y cumplir ese verso de Rubén Blades cuando nos cantaba: “prohibido olvidar”.

La peña del profesor Juan Antonio Martínez de Osaba, Deporte y Cultura, en la sede del Centro de Promoción y Desarrollo de la Literatura Hermanos Loynaz, en la ciudad de Pinar del Río, fue el espacio para homenajear a Tony Oliva, quien estuvo acompañado de su hermano Juan Carlos, además de otras luminarias del béisbol cubano como Luis Giraldo Casanova, Rogelio García y el entrenador de picheo José Manuel Cortina.

Ese día, tuve solamente 10 minutos frente a frente, poquísimo tiempo para tantas historias por contar. Aunque nos dejó mucho por indagar y rescatar de su pasado, que también es parte de la historia de nuestro pasatiempo nacional, este es Tony Oliva, un inmortal del béisbol cubano.

¿Qué siente Tony Oliva cada vez que regresa a Cuba?
No tuve la oportunidad de jugar en Cuba en la pelota profesional y no me vieron jugar aquí, pero cada vez que vengo me siento muy bien. Toda mi familia está aquí, también mis amigos: es muy importante para mí.

¿Le hubiese gustado alguna propuesta como entrenador en Cuba?
Yo sé que tenía oportunidad de ser entrenador, a lo mejor me la daban, o no sé, porque como era profesional y anteriormente no dejaban, pero yo creo que ahora sí. Minnesota Twins me dio la oportunidad de ser entrenador con el equipo, en las Ligas Mayores 9 años y en Las Menores 16 años, y todavía estoy con ellos con 84 años de vida y 62 años en el béisbol profesional. Ahora, cuando regrese para Estados Unidos, voy a los entrenamientos de primavera por tres semanas a ayudar.

El año pasado tuvimos un tiempito a Yennier Cano, pero no triunfó con nosotros y fue cambiado para Baltimore. Me gustaría que tuviésemos unos cuantos cubanos dentro de la organización.

¿Quiénes son los peloteros cubanos que más le impresionan en Las Mayores?
José Dariel Abreu es especial y ha tenido años muy buenos consecutivos. También, están Yordan Álvarez, Yulieski Gurriel y Luis Robert. Él tiene mucha potencia, comenzó muy bien y se lesionó, pero ese muchacho no tiene límite.

“Siento que he estado en el Salón de la Fama toda mi vida, me fui para Estados Unidos, pero pensé que nunca iba a jugar profesional o Grandes Ligas, tener la oportunidad de jugar en República Dominicana, Puerto Rico, en México”.

Tony Oliva regresa a Cuba: “siento que he estado en el Salón de la Fama toda mi vida”

¿Cómo ha sido el cariño hacia Tony Oliva dentro de la organización de Minnesota y en la comunidad?
Me han tratado muy bien todos estos años, y yo los he tratado bien a ellos, si no, no estuviese ahí. Es la mejor comunidad de todo Estados Unidos para mí desde un principio, cuando llegué en 1961 y luego cuando me quedé jugando regular en 1964. Siempre se han portado muy bien, no solo conmigo, sino con mi familia. Me hicieron una estatua, eso es increíble a mí, para un guajirito del campo de Corralito.

¿Cómo valora al béisbol cubano actual?
Los muchachos están haciendo un buen trabajo. Es muy difícil para los equipos tener todo, picheo, bateo, pero aquí hay que seguir echando para adelante y seguir jugando la pelota de la misma forma en que se jugaba antes: con el corazón. Ahora, no sé cómo, los entrenadores de aquí trabajan eso, pero la pelota que nosotros vimos en los 60, 70, 80, 90 va a ser difícil de verla, en los Estados Unidos tampoco, porque ahora hay muchas personas que están dirigiendo frente a la computadora, todo es computadora.

En un determinado momento de su carrera le criticaron su swing.

Si tú produces, no te deberían molestar, si tú no produces, un buen coach te ve una vez y detecta las dificultades. Yo he tratado con peloteros que han estado bateando 200 y les aconsejo, lo trato por un día, vamos hacer esto, y lo falla y dice que no puede, tú no puedes, pero si no produces y no puedes hacer un cambio, te van a botar: el pelotero inteligente está al lado de los inteligentes.

“Eso del Salón de la Fama había fallado tantas veces, me sentía más mal por mi señora que por mí, y mis amigos y fanáticos, sufrían más que yo, sabían que estaban haciendo una injusticia, llegaron otros peloteros que no tenían mis credenciales, hay muchas cosas que cuentan que no son solo los números, hay que estar limpiecito, tienes que recibir la ayuda de Dios para que todo esté bien”.

¿Se le acercan a Tony Oliva en los entrenamientos?
Yo voy a ellos antes de ellos a mí, si fuesen inteligentes viniesen a mí, pero no vienen mucho a mí porque tienen miedo. Cada equipo tiene varios instructores, pero tienen uno que está en cabecera. Estoy ahora ayudando, pero no soy uno de esos coach. Hay cositas que no me gustan en los entrenamientos, ¿cómo voy a perder media hora bateando en un lugar donde la pelota no se mueve? Le digo a los muchachos que no pierdan el tiempo bateando con eso, que hasta mi nieta de 7 años le da.

¿No cree que Pinar del Río le debe un reconocimiento mayor?
No, digo que lo que hice está hecho. Dios es muy grande y me dio esa oportunidad de jugar, porque salir de Corralito sin entrenamiento -no jugué ninguna pelota profesional, ni amateur- y llegar al profesionalismo en Estados Unidos y triunfar, es algo inmenso para mí: así que todo lo que hagan para mí es grande.

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Antonio Pedro Oliva López


deportes, beisbol, entrenador, bateador, jardinero izquierdo