Tomás Sánchez, considerado como el pintor cubano vivo más cotizado, rompió un récord de venta en la legendaria casa de subastas de Christie’s, al vender el cuadro «Llegada del caminante a la laguna» en $1.8 millones de dólares.

Esto lo convierte en uno de los primeros artistas cubanos en lograr precios millonarios en vida, como Carmen Herrera, recientemente fallecida. De hecho, el monto de la venta del lienzo, creado en 1999, lo colocó en el tercer artista mejor vendido en la subasta de arte latinoamericano, celebrada en Nueva York este viernes, una de las principales sedes de Christie’s alrededor del mundo.

De hecho, solo piezas del mexicano Diego Rivera y el colombiano Fernando Botero han alcanzado precios por encima del millón de dólares. «Esta noticia es un logro para el arte cubano, los artistas cubanos y su prestigio con su extraordinaria calidad y arduo trabajo», reflejó un comunicado del Estudio de Tomás Sánchez.

El precio final para «Llegada del caminante a la laguna» duplicó el estimado inicial de la casa de subastas.

El primer lugar en la subasta lo ocupó el pintor y escultor colombiano Fernando Botero, de 89 años, con su escultura «Hombre sobre caballo», que alcanzó un valor de $4,320,000 dólares. El muralista mexicano Diego Rivera (1886-1957), con la obra «La Bordadora», que logró venderse por $4,140,000 dólares, fue el segundo.

Artistas como Wifredo Lam (1902-1982) y Roberto Fabelo (1950), se suman al lote de obras puestas en subasta y vendidas. Lam, por su parte, fue el noveno mejor vendido, con «Pomme Zombie», por $756,000 dólares; y Fabelo ocupó el onceno lugar, con «Perrerío», por $579,600, y rompió también su propio récord, que era de $399,00 dólares, con su obra «Viaje al jardín fantástico».