Pablo
Miguel
Merino

Pablo Miguel Merino
Nacimiento:  
20
/
9
/
1887
Fallecimiento:  
3
/
4
/
1944

Matemático. Eminente Profesor de Análisis Matemático de la Universidad de La Habana, de 1913 a 1944, autor de excelentes textos sobre la disciplina. El 20 de mayo de 1913 se hizo cargo de la cátedra de Análisis Matemático, responsabilidad que ocupó hasta su muerte.

Nació en La Habana. Cursó la primera y la segunda enseñanzas en el Colegio de Belén de La Habana. Al graduarse de Bachiller pasó a España, donde cursó el primer año de estudios de ciencias en la Universidad de Deusto, cerca de Bilbao (1903-1904), como preparación para seguir estudios de Ingeniería Civil. Examinó asignaturas en las universidades de Salamanca y Central de Madrid, con calificaciones de sobresaliente y con premio extraordinario.

De regreso a Cuba, a los 17 años, continuó sus estudios en la Universidad de La Habana, donde se graduó sucesivamente, con un brillante expediente académico, de Doctor en Ciencias Físico-Matemáticas (1908), Arquitecto (1910) e Ingeniero Civil (1912).

En 1908, Miquel ganó por oposición la plaza de Ayudante Facultativo del Gabinete de Astronomía de la Universidad de La Habana, y luego la de Profesor Auxiliar de la Cátedra de Astronomía (1912). En Mayo de 1913 pasó a ejercer la docencia de Análisis Matemático, en sustitución del catedrático titular, el ingeniero José R. Villalón, a quien se había concedido licencia para desempeñar el cargo de Secretario de Obras Públicas.

El 1 de septiembre de 1921 fue nombrado Profesor Titular de la Cátedra de Análisis Matemático de la Universidad de La Habana, al triunfar en el correspondiente concurso-oposición, convocado al efecto con motivo de la renuncia de Villalón al cargo. El profesor Miquel mantuvo a un alto nivel la enseñanza del Análisis Matemático durante los más de 30 años que estuvo al frente de la docencia de esta disciplina en la Universidad de La Habana, lo cual, a su vez, ejerció una saludable influencia sobre la enseñanza de la matemática en el nivel secundario.

Falleció en Ciudad de La Habana, el 3 de abril de 1944.

Con todo, las duras realidades de Cuba en aquella época hicieron que tuviese que dedicar gran parte de su tiempo a ganar el pan diario para su numerosa prole, a tal extremo que, según el profesor Manuel F. Gran: "murió en lo mejor de su vida, agotado en menesteres situados a un nivel muy inferior a los que correspondían a su robusta condición intelectual, habiéndose malogrado y dejado truncar un investigador".

En 1979, la Sociedad Cubana de Matemática instituyó el premio “Pablo Miquel” para galardonar a los matemáticos cubanos que han cumplido una labor destacada en su especialidad.

En 1914 publicó sus Elementos de Álgebra Superior, que había compuesto rápidamente con vistas a enriquecer su expediente académico. De esta obra vio la luz en 1939 una versión muy ampliada, que se utilizó muchos años como texto universitario. Sus textos mejores son, sin embargo, un volumen sobre Cálculo Diferencial y otro sobre Cálculo Integral, publicados en 1941 y 1942, respectivamente, los cuales también se utilizaron con provecho durante muchos años, como lo demuestran las múltiples reimpresiones realizadas a partir de 1959. Todas estas obras se caracterizan por ofrecer un tratamiento muy completo y riguroso de las materias respectivas, así como por su claridad y alta calidad pedagógica, donde no es lo menos importante la gran cantidad de ejercicios originales propuestos, de gran utilidad para el adiestramiento del estudiante.

Considerado generalmente por sus colegas como el representante por antonomasia de la entonces pequeña comunidad de profesionales cubanos dedicados a las ciencias físico-matemáticas, por su capacidad evidente, su extraordinaria voluntad de servicio, laboriosidad y bondad y sencillez naturales, no menos que por su honradez y modestia, fue elegido Presidente de la Sociedad Cubana de Ciencias Físicas y Matemáticas al fundarse ésta, en 1942.